sábado, 9 de diciembre de 2017

ROBERTO ABRIL – PUERTO RICO-USA



ESTOY MUERTO


Mi cuerpo cadáver… ¡es –este frío!

… incontables cadáveres conmigo;

Consciente estoy, -¿Qué me pasa?

Apenas moverme puedo...

¡Ah, estoy fuera de mi cuerpo! --Esto es exquisito.

Fin Apocalíptico… llegó el momento… ¡El Rescate…!

Oh, vuelan millones de mosquitos, reproducense en aguas estancadas.

¿Vendrán los que pican? Aedes, Anopheles, Culex, Chikungunya o el Zika…

¡Pobres niños!

¡Qué ninguno haya muerto; qué ninguno…Mis niños!

La vaca muerta, macabra cuelga del tendido eléctrico.

-- ¡Qué vientos del infierno han arrebatado vidas, propiedades y lamentos! “Huracán María, que vil destino; Puerto Rico…han cimbrado tus fundamentos”.

Anoche, no tenía pistola.

Al oír disparos, salí al patio a buscar a mis hijos

Ya no recuerdo…, atravesaron por un costado mi pecho.

Otra vaca…a punto de estallar. -la siento, la huelo,...la apesto.

¿Me muero o no me muero? –Hilo de aire, a mis pulmones llega.  Y una pregunta:                     … ¿Se infectarán los niños?...

¿Soy acaso, espíritu, flotando, que se ha ido del cuerpo y yace muerto?

…¡Dios mío! --¡Mis hijos!

--¡Por favor, te imploro permiso para salvarlos!