NUESTRAS LETRAS
Sé que estás allí, tan lejos pero tan cerca,
tanto que estirando mi mano toco tus palabras
y en el salitre que el mar llora a la distancia
me hago lágrimas en tu novela.
Puedo sentir el palpitar de la creación
desenfrenada, primigenia y pura,
pero también puedo ver con los ojos del alma
tus letras bailoteando sobre la hoja blanca,
párpado abierto en la inmensidad del tiempo
arracimando ideas que se agolpan calmas.
Porque sé que estás allí esperando el día,
un miércoles distinto que se haga alba,
una esperanza compartida a medias
y la misma pasión que de Letras habla.
Por eso te pienso releyendo las noches
como quien relee de la vida las mañanas
que no se pueden quedar en el tintero
escapándose sin permiso de tu morada.
Sé que estás allí, tan lejos pero tan cerca,
tanto que estirando mi mano toco tus palabras
que en mí se quedan hundidas como dagas
porque espero ese miércoles distinto
que aunque resulte igual al resto
para nosotros será el alba.
Liliana Cristina García
ARGENTINA
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