domingo, 20 de diciembre de 2009

América Sorá - Pérdida de memoria

Vagaba por las calles y no recordaba hacia donde me dirigía, me pregunte si estaba de paseo o iba rumbo al trabajo.


Hace años que olvido detalles importantes, como nombres de familiares, direcciones...


Mi abuela paterna perdió la memoria a los setenta años, cuando no pudo conversar con su hijo que la había llamado desde los Estados Unidos, desde ese momento, mi padre la cuido como una niña y murió sin reconocerlo, por eso tomo pastillas para la memoria desde los 45 años, con la esperanza de reconocer a los míos hasta mis últimas horas.


Días atrás quede paralizada cuando un joven me tomó de la mano, me sentó en un banco y me preguntó.


-Señora esta usted perdida?


No sabía que responderle al joven


-No sé, balbuceé, pero mi idea era ir a comprar papas a la bodega.


Llevaba mi jaba de los mandados pero estaba vacía, por lo que supuse que nunca llegue a la bodega.


El joven muy atento, me sentó en un banco del parque hasta que una vecina me reconoció y me condujo de regreso a casa, pero en ella solo habían fotos…, de mis hijos, parientes, amigos…solo recuerdos que a veces olvido y trato de hilvanar alguna que otra historia que me hacen sentir que hubo vida en ella.


Hoy después de recorrer las calles tantas veces caminadas sin que nadie se fijara en mi y con mi mente en blanco, disfrute del mar, al contemplar su inmensidad sentí la pequeñez de la vida, olí su aroma y mi mente funciono, como un destello. Recordé como tiempos atrás íbamos a la costa, nadábamos, pescábamos y de regreso mi corazón rebozaba de felicidad.


Pasaron horas sentada frente al mar, sin que nadie se percatara de mi presencia pero mi mente funcionaba, era un milagro estar de nuevo percibiendo la realidad, hasta que recordé lo último que se había registrado en mi memoria.


Ese día estaba sola como hace muchos años y sentí un fuerte dolor en el pecho, caí y creo que fue cuando desperté y me encontré caminando sin rumbo, sin recordar… que horas antes había muerto.


América Sorá