MARIA ESPERANZA CAVIEDES SANCHEZ.
A continuacion dos de sus obras:
Mi viejita querida, mi viejita adorada
A mi viejita querida
A mi viejita adorada
Hoy nos dejaste solitos
Hoy cerraste tus ojitos
Para ya nunca despertar
El dolor no deja de cesar
Mi vida entera se ha quebrado
Tu alma se ha alejado
Y aunque ya no te vuelva a ver
Tu recuerdo vivirá siempre en mí
Tu impartías alegría, confianza
Tú brindabas amor y esperanza
Eras lo más importante para mí
Y sé que desde hoy ya no estarás
Vivirás en nuestros corazones
Como aquella flama ardiente
Aquella que jamás se extingue
Estaremos solitos por un tiempo
Lágrimas y lágrimas no dejan de correr
Y aunque nuestra alma este destrozada
Vivirás eternamente feliz
Felicidad que embriagas con tu ser
Te fuiste sin un adiós
Te fuiste para ya no regresar
Y desde hoy brillaras como los luceros
Y desde donde quiera que estés
Sabrás que te quise y te ame
Como a nadie pensé querer
Nos enseñaste el valor de la vida
Y aunque ya no encuentres la salida
Siempre serás: ¡mi viejita querida!
¡Mi viejita adorada!
María Esperanza Caviedes Sánchez 16-09-04
MENDIGO DEL AMOR
He sido mendigo del amor,
He ido tras de ti, sin esperanza.
Mendigo del amor, es lo que he sido,
Vagabundo y errante sin destino.
Te he buscado por doquier,
Sólo por estar junto a ti.
Te he dicho mil veces: Te quiero.
Y de ti, no obtengo frase alguna.
A veces, me has dado el cielo,
Pero también, me has dado el infierno.
Mendigo del amor, es lo que he sido,
Ciego eres al no ver, lo que por ti siento,
Ciega soy por seguir tras de ti.
En un camino que no tiene salida
Porque el amor no se mendiga,
El amor se da, de corazón
Nace del alma y se esparce con calma
Porque el amor no se mendiga,
El amor se entrega sin vacilación,
El amor, sentimiento entre dos
Tú y yo somos dos y tres
Y tú y yo somos uno solo.
Eso es el amor, sentimiento mutuo
El amor es compartir, es conocer,
El amor es vivir, es sonreír,
El amor es sorprender, es conquistar,
El amor es sensible, es demostrar,
El amor es puro y tierno a la vez,
El amor es compasivo y frágil a la vez
El amor no debería mendigarse,
Porque es un sentimiento más de Dios.
Y aún así he sido mendigo del amor
María Esperanza Caviedes Sánchez 14-3-12
